Consejo de seguridad nº1: Supervisar activamente
Qué hacer:
Observe y supervise de cerca a los bebés pequeños para que pueda verlos y alcanzarlos en todo momento. La supervisión activa incluye estas seis estrategias:
- configurar el entorno,
- posicionar al personal,
- observar y contar,
- escuchar,
- anticipar el comportamiento de los niños,
- involucrarse y redirigir.
Por qué funciona:
Los bebés cambian constantemente y siempre están adquiriendo nuevos intereses y habilidades. Los cuidadores que utilizan estrategias de supervisión activa son capaces de responder a las necesidades individuales de cada bebé, prestando mucha atención y anticipando y eliminando los peligros potenciales. La supervisión activa en las aulas con agrupaciones de distintas edades es una estrategia importante para garantizar la seguridad de los niños en diferentes etapas de desarrollo.
Consejo de seguridad nº 2: Crear ambientes seguros
Qué hacer:
Configure el espacio interior con muebles apropiados para la edad para que los bebés pequeños puedan explorar su entorno de manera segura. Configure los muebles para que el personal pueda ver con claridad y supervisar activamente a los bebés en todo momento. Asegúrese de que los muebles no tengan esquinas puntiagudas ni pintura descascarada y que no haya ningún cordón colgando. Proporcione un área separada para el "tiempo en la barriguita" para los bebés pequeños, lejos de las áreas de juego para los bebés que se desplazan solos.
En los entornos al aire libre, ofrezca una superficie blanda, como una manta. Utilice la sombra de un árbol, un dosel de la carriola o un paraguas para proteger a los bebés pequeños de la exposición a la luz solar directamente.
Por qué funciona:
Los muebles que están a la altura de la cintura les permiten a los cuidadores ver y escuchar todo lo que está sucediendo en la habitación, ya sea que estén sentados o de pie. Todos los muebles deben estar en buen estado y correctamente fijados. Apartar un área especial para "tiempo en la barriguita" que no esté en la ruta directa de un bebé que se desplaza solo protege a los niños más pequeños de las lesiones.
Todos los niños necesitan oportunidades para jugar y explorar el exterior así como el interior. La exposición a las vistas, sonidos y experiencias de su entorno al aire libre apoya el desarrollo infantil en todos los dominios.2 Sin embargo, los cuidadores que trabajan con los bebés pequeños deben tomar medidas específicas para asegurarse de que las experiencias al aire libre sean positivas y seguras. Sombra y una ropa apropiada son la mejor protección solar para los bebés pequeños.
Consejo de seguridad nº 3: Mantener ambientes seguros
Qué hacer:
Antes de usar cada mueble y equipo, haga inspecciones de seguridad en los ambientes interiores y exteriores, y elimine cualquier peligro.
Por qué funciona:
Los bebés necesitan lugares seguros para aprender y crecer. Cuando los cuidadores utilizan una lista de verificación (en inglés) de seguridad en los entornos que coinciden con el nivel de desarrollo de un niño, son capaces de identificar posibles peligros y quitar o reparar cualquier objeto que pudiera lesionar a un niño.
Consejo de seguridad nº 4: Almacenar y poner bajo llave los productos tóxicos
Qué hacer:
Coloque todos los productos de limpieza, otros productos químicos, medicamentos y materiales para el aula que pudieran ser dañinos para los bebés en estantes cerrados con llave fuera de su alcance. Guarde los abrigos, monederos y bolsos del personal en armarios o fuera del aula.
Por qué funciona:
Los bebés pequeños aprenden sobre su entorno explorando objetos con todos sus sentidos. Los bebés que pueden alcanzar un producto de limpieza pueden ponérselo en la boca, inhalarlo o derramarlo sobre su piel. Los productos químicos pueden envenenarlos o quemarlos. Cuando los cuidadores almacenan productos tóxicos en armarios cerrados y mantienen los artículos personales fuera del alcance de los niños, estos productos no pueden representar una amenaza para los bebés pequeños.
2Thigpen, B. (2007). Outdoor Play: Combating Sedentary Lifestyles (en inglés) [El juego al aire libre: Cómo combatir los estilos de vida sedentarios] ZERO TO THREE, 28(1), 19–23.
Consejo de seguridad nº 1: Manténgase activo y comprometido
Qué hacer:
Para evitar las caídas, mantenga una mano sobre los bebés pequeños cuando están en un cambiador u otra superficie elevada. Involucrar a los bebés pequeños en juegos recíprocos como cantar, hablar y hacer eco ayuda a mantenerlos seguros y ofrece oportunidades para aprender.
Por qué funciona:
Los bebés pequeños están constantemente explorando lo que su cuerpo es capaz de hacer. Pueden menear los brazos o las piernas, empujarlos sobre la almohadilla del cambiador, intentar voltearse o deslizarse hacia adelante o atrás. Puesto que sus movimientos pueden ser imprevisibles, mantenerse muy cerca del bebé puede evitar que se caiga de un cambiador u otra superficie alta. Además, proporcionar una actividad positiva y atractiva durante el cambio de pañales fomenta una relación protectora, crea oportunidades de aprendizaje y previene lesiones al centrar la atención del niño durante el cambio de pañales.
Consejo de seguridad nº 2: Almacene los suministros de pañales con seguridad
Qué hacer:
Mantenga los medicamentos tópicos para erupciones cutáneas y afecciones de la piel, y los ungüentos para pañales al alcance del cuidador, pero lejos del alcance de un niño. Desinfecte las áreas donde se cambian pañales después de cada uso. Espere hasta que los niños se hayan ido de la zona para evitar exponerlos a las sustancias químicas de estos productos. Siga las normas de su estado para las licencias cuando almacene la solución desinfectante. Para más información acerca de los procedimientos para cambiar pañales (en inglés) en El cuidado de nuestros niños del Centro Nacional de Recursos para la Salud y la Seguridad en el Cuidado Infantil y la Educación Temprana (CFOC).3
Por qué funciona:
Las áreas para el cambio de pañales pueden contener medicamentos o ungüentos para la erupción de la piel u otras afecciones cutáneas además de los suministros desinfectantes. Los bebés pequeños tratan de agarrar objetos. Conforme crecen, son más capaces de agarrar y poner en la boca los materiales que están a su alcance. Los bebés pequeños pueden tratar de agarrar botellas de aerosol, toallitas desinfectantes, ungüentos, medicamentos u otros materiales dañinos que están cerca del área de cambio de pañales y ponerlos en la boca. La colocación considerada de estos artículos es necesaria para evitar que los niños los toquen.
3American Academy of Pediatrics, American Public Health Association, & National Resource Center for Health and Safety in Child Care and Early Education. (2011).Caring for our children: National Health and Safety Performance Standards Guidelines for Early Care and Education Programs [El cuidado de nuestros niños: Pautas sobre las normas del desempeño de la salud y seguridad para el cuidado y la educación en la primera infancia] (3ra ed.). Elk Grove Village, IL: American Academy of Pediatrics. Obtenido de http://nrckids.org (en inglés)
Consejo de seguridad nº1: Compruebe la temperatura de los alimentos
Qué hacer:
Cuando se alimenta por biberón, CFOC recomienda servir los biberones fríos del refrigerador o colocarlos "debajo del agua corriente, tibia del grifo o ponerlos en un envase con agua que no sea más caliente que 120 grados" por cinco minutos para calentarlos. CFOC ofrece instrucciones detalladas sobre el calentamiento de biberones y alimentos infantiles (en inglés) y en la preparación, alimentación y el almacenamiento de leche materna (en inglés).
Por qué funciona:
La boca de un bebé es particularmente sensible a la temperatura y puede quemarse si los líquidos están demasiado calientes. El microondas no calienta uniformemente los líquidos y puede causar quemaduras. Poner el biberón en un calentador de biberones o colocarlo en agua tibia es más seguro y eficaz.4
Consejo de seguridad nº 2: Posicione a los niños para que coman con seguridad
Qué hacer:
Sostenga firmemente a los bebés que se alimentan con biberón y asegúrese de que puedan respirar libremente por la nariz. Una vez que un bebé es capaz de sentarse y comer alimentos colados, utilice una silla de comer con correas de seguridad.
Por qué funciona:
Los bebés respiran por la nariz cuando comen, por lo que sus pasajes nasales no deben estar obstruidos para tomar el biberón. Sostenga con seguridad al bebé que toma el biberón. Para un bebé que es capaz de sentarse y comer alimentos colados, utilice una silla que sea baja con los lados altos y abroche las correas para reducir el riesgo de lesiones por una caída.
Consejo de seguridad nº 3: Escoja alimentos adecuados a la edad del niño
Qué hacer:
Cuando los bebés estén listos para comer alimentos de una cuchara, consulte con las familias e introduzca alimentos apropiados para su edad y culturalmente receptivos. Asegúrese de que todos los alimentos sean colados o en puré. El Departamento de agricultura de Estados Unidos (USDA, sigla en inglés) recomienda que se ofrezcan a los bebés de 4 a 7 meses solo frutas y vegetales colados y cereales fortificados con hierro. Las directrices del USDA (en inglés) ofrecen información importante sobre los patrones de comida y de alimentación de los bebés.
Por qué funciona:
La garganta de un bebé es pequeña y puede obstruirse fácilmente. Los bebés pequeños todavía están aprendiendo a controlar su lengua, a masticar y tragar. A medida que los bebés crecen, tienen más control sobre su capacidad de mover los alimentos alrededor de la boca y son capaces de comer alimentos colados/filtrados y purés sin atragantarse. La secuencia del desarrollo y las habilidades de alimentación de los bebés normales y sanos a término (en inglés) del USDA: Alimentación de los bebés: Una guía para usar en los programas de nutrición infantil (en inglés) es un gráfico útil para entender cuáles son los alimentos seguros para los niños en las diferentes etapas de desarrollo.
4Centers for Disease Control and Prevention. (2010). Manejo y almacenamiento correcto de la leche materna. Obtenido de http://www.cdc.gov/breastfeeding/recommendations/handling_breastmilk.htm (en inglés)
Consejo de seguridad nº 1: Utilice cunas seguras
Qué hacer:
Utilice las nuevas normas federales (en inglés) de seguridad de la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo de EE. UU. (CPSC, sigla en inglés) para proteger a los bebés de lesiones, asfixia o estrangulación en una cuna. Las cunas con baranda plegable no cumplen con las normas de seguridad vigentes. Los programas no tienen permiso de utilizarlas. Además, los programas deben ayudar a las familias a localizar reemplazos para las cunas con barandas plegables.
Por qué funciona:
Cuando los niños pequeños empiezan a mover su cuerpo, pueden ponerse en posiciones peligrosas. Mientras se acuestan sobre la espalda, pueden empujarse o menearse en el costado de una cuna. Pueden también deslizar sus brazos a través de las tablillas en una cuna y quedarse estancado en posiciones que podrían lesionarlos. El uso de cunas seguras evita las lesiones en los bebés pequeños.
Consejo de seguridad nº 2: Utilice prácticas seguras para dormir
Qué hacer:
Es importante emplear prácticas de sueño seguro. Coloque siempre a los bebés pequeños boca arriba para dormir y sin mantas ni juguetes que puedan cubrirle la boca o la nariz. Use un colchón firme y una sábana bien ajustada al colchón. Comparta las recomendaciones de la CPSC (en inglés) con las familias que "estar descubierto es mejor" en los arreglos para dormir para los bebés y que es más seguro no usar parachoques en una cuna.
Por qué funciona:
Los bebés pequeños adquieren la capacidad de voltear la cabeza y el cuerpo a medida que crecen. Hasta que sean capaces de controlar cómo se mueven sus músculos, están en riesgo de asfixia y del Síndrome de Muerte Súbita Infantil (SIDS, sigla en inglés). Los cuidadores pueden reducir este riesgo colocando a los bebés boca arriba en cunas sin juguetes, almohadas ni mantas sueltas.
Consejo de seguridad nº 1: Utilice equipos y materiales que sean seguros para los bebés pequeños y que no tengan partes pequeñas
Qué hacer:
Seleccione el equipo que sea apropiado para los bebés para que no haya nada donde puedan quedarse atrapadas su cabeza o sus extremidades. Asegúrese de que los cochecitos/las carriolas sean apropiados para la altura y el peso de los niños. Escoja esteras o alfombras para jugar, columpios, mecedoras, transportadores y otros equipos que se ajusten a las restricciones de altura y peso de los bebés. Utilice siempre correas o cinturones de seguridad para garantizar que los bebés no se caigan.
Inspeccione periódicamente los materiales y equipos para identificar, eliminar o reparar cualquier objeto que pudiera lesionar a un niño. Solo proporcione juguetes que sean seguros para los bebés y coloque los juguetes más pesados en los estantes inferiores. Coloque fuera del alcance de los niños cualquier objeto que sea lo suficientemente pequeño como para caber en la boca de un niño pequeño. Asegúrese de que los materiales y el equipo, incluidas las muñecas y los animales de peluche, no tengan piezas pequeñas y sueltas que puedan caerse y supongan un peligro de asfixia. Cualquier objeto que pueda pasar a través del cilindro de partes pequeñas (2,25 pulgadas de largo por 1,25 pulgadas de ancho) utilizado para detectar los peligros de ahogo (en inglés) de los niños menores de 3 años, es demasiado pequeño para que los bebés pequeños jueguen con él.
Para más información, véase el Cilindro para probar las partes pequeñas de los equipos y juguetes de ASTM (en inglés) y Qué juguete para qué niño: Guía del consumidor para seleccionar juguetes adecuados (en inglés).
Por qué funciona:
El equipo apropiado para la edad evita lesiones por atrapamiento. Las correas de seguridad sostienen a niño en un cochecito, columpio, balancín, portador u otro equipo y reducen el riesgo de las caídas. Las inspecciones rutinarias de materiales y equipos eliminan los peligros potenciales. Colocar objetos pesados en estantes inferiores reduce la probabilidad de lesionarse por un juguete que cae.
Los bebés pequeños se están volviendo más conscientes de su entorno. Utilizan sus manos y boca para explorar. Tan pronto como un bebé es capaz de agarrar objetos, este puede tratar de agarrar un objeto a su alcance y llevárselo a la boca. Proporcionar juguetes y materiales que no contengan piezas pequeñas o sueltas elimina los riesgos de asfixia.
Para inscribirse y recibir los avisos de productos retirados del mercado, visite el sitio web de la Comisión de Seguridad de los Productos de Consumo de EE. UU. para ver qué artículos se han retirado en: https://www.cpsc.gov/es/content/suscripciones (en inglés)