Configuración de los sistemas para las observaciones continuas

una mujer tendida en el suelo observa a un bebé jugando boca arribaPor lo general, los bebés y los niños pequeños no demuestran lo que saben y pueden hacer "a pedido" (es decir, cuando el observador lo desea). Sin embargo, aun así el personal docente puede ser intencional en cuanto a captar y registrar lo que los niños hacen y dicen, creando un sistema para llevar a cabo las observaciones.

No hay una única manera correcta de hacerlo. Un sistema de observación en un salón de clases basado en el centro con dos maestros puede ser diferente al sistema que usa un proveedor de cuidado infantil familiar que trabaja solo. Estos sistemas probablemente serán diferentes de los utilizados por los visitadores del hogar durante las visitas al hogar y las experiencias de socialización. Además, los sistemas de observación no son estáticos; deben reconsiderarse a medida que el personal docente se vuelva más competente en la observación de los niños y a medida que los niños crezcan y se desarrollen.

Estas son algunas estrategias generales que se deben tener en cuenta al crear un sistema:1

Planifique el tiempo para observar a un niño

Para captar la profundidad y el alcance de las destrezas, habilidades e intereses de los niños, observe en diferentes momentos del día y en diferentes entornos. Por ejemplo, observe a los niños:

  • En todos los entornos (p. ej., interiores y exteriores) y a todas horas del día (p. ej., por la mañana y por la tarde).
  • Durante las rutinas (p. ej., horas de la comida, cambio de pañales y aseo, siesta, la hora de vestirse, llegada y salida).
  • Cuando se involucren en experiencias de juego y pasen de una experiencia de juego a otra.
  • Cuando interactúen con otros niños y adultos.

Cree un plan para asegurarse de que cada niño sea observado regularmente (p. ej., una vez al día o a la semana) y que se aborden las metas individuales del niño, y las metas programáticas de preparación escolar según corresponda. Cuando utilice un método de observación que requiera tomar distancia durante un período de tiempo para observar, como un registro continuo, coordine ese tiempo de observación con otro adulto. Esto garantiza que se supervise a los niños y que se mantengan la proporción entre el personal y los niños.

Repita las observaciones a lo largo del tiempo. Para muchas habilidades y comportamientos -sobre todo cognitivos, sociales y emocionales, lenguaje y lectoescritura, y enfoques de aprendizaje- una sola observación no proporciona suficiente información como para determinar con certeza lo que un niño sabe y puede hacer. Los comportamientos de los niños no siempre son constantes. Muchos factores (p. ej., una enfermedad, falta de sueño, hambre, cambios en el hogar, cambios en el horario del día, cambios en el personal, el proceso de desarrollo) pueden influir en lo que los niños hacen y dicen día a día, e incluso de una hora a otra. Por lo tanto, se necesitan múltiples observaciones.

Sin embargo, una observación puede proporcionar información sobre más de un área de desarrollo. Por ejemplo, la siguiente observación proporciona información relacionada con las habilidades motrices, sociales y emocionales, y del lenguaje:

5/5, espacio de juego al aire libre, 2:30 p. m.:
Jorge (de 13 meses) en el juguete con ruedas, sostiene el manubrio, lo empuja recto usando los pies. Se detiene frente a Wendall (de 13 meses), se inclina hacia adelante, le da tres palmaditas en el brazo a Wendall, dice: "Da, Da". Wendall se hace a un lado. Jorge continúa empujando el juguete con los pies y conduce directamente hasta el borde del pavimento sin chocar con nada ni con nadie.

Planifique oportunidades de observación espontáneas

Aunque esto puede sonar como una contradicción, no lo es. Muchas veces, los bebés y niños pequeños hacen y dicen cosas que son nuevas e inesperadas. Estos comportamientos pueden ocurrir durante las horas de observación no planificadas. El personal puede prepararse para estos momentos de la siguiente forma:

  • Colocando materiales para tomar notas (p. ej., útiles de escritura, fichas, notas adhesivas, etiquetas de envío por correo, libretas de notas, portapapeles y papel) en lugares estratégicos alrededor del salón, en el bolsillo de una bata o un delantal, o en la bolsa de la visitadora del hogar.
  • Asegurándose de que las cámaras y los dispositivos de grabación de audio y video estén funcionando, estén completamente cargados y se pueda acceder a ellos con facilidad.

Decida cómo se organizarán y almacenarán las observaciones

Hay diversas maneras de hacerlo. El personal debe elegir lo que funciona mejor para ellos. Por ejemplo:2

  • Una carpeta para cada niño guardada en archivos suspendidos en un archivador, caja grande o cajón.
  • Fichas en una caja de archivo con una sección para cada niño.
  • Cuaderno de tres anillos para cada niño.
  • Una carpeta de acordeón para cada niño.
  • Una zapatera colgante, con bolsillos etiquetados para cada niño.
  • Un sistema en línea para la evaluación del niño.

Muchos programas EHS y MSHS le piden al personal que cree expedientes para apoyar la evaluación basada en la observación. Los expedientes son una recopilación del trabajo de los niños, notas y fotografías de las familias, listas de verificación y otras herramientas de registro por escrito, y otros artículos que documentan lo que los niños saben y pueden hacer. Las notas de observación por escrito, las fotos y las grabaciones de audio y video pueden incluirse como parte del expediente. Los expedientes pueden ser físicos, virtuales o una combinación de ambos. Algunas herramientas de evaluación en línea les permiten a los usuarios introducir notas de observación y subir fotos, videos y archivos de audio para cada niño. Para que sean útiles, los elementos del expediente deben:3

  • Tener fecha y ser archivados en orden.
  • Reflejar varias partes del día (p. ej., rutinas, experiencias de juego, transiciones).
  • Presentar una visión equilibrada del crecimiento del niño en todos los dominios centrales del ELOF.

Con el tiempo, la recopilación de expedientes sirve como un registro concreto del progreso del niño hacia las metas individuales, y de las metas de preparación escolar programáticas, según corresponda. Por lo tanto, se debe revisar de forma regular con las familias. El personal debe explicar lo que incluye en el expediente y por qué. También debe alentar activamente a las familias a que aporten información y elementos al expediente de sus hijos.

Tenga en cuenta que la información de la observación y los expedientes de los niños deben mantenerse confidenciales. Los programas EHS y MSHS deben seguir sus políticas de confidencialidad con respecto al almacenamiento y sobre quién tiene acceso y permiso para ver la información. Las familias deben tener permiso para ver solo la información sobre la observación y el expediente de sus hijos.

Busque tiempo para registrar las observaciones

Esto podría ser durante la siesta, el tiempo de planificación, al principio o al final del día, o al final de cada semana. No espere demasiado; las observaciones pueden acumularse rápidamente o perderse durante un día o una semana ajetreados.

Decida con qué frecuencia revisará las observaciones

Cuanto más frecuentemente el personal revise las observaciones (p. ej., a diario, semanalmente, cada dos meses), más pronto tendrán la información que necesitan para responder adecuadamente a cada bebé y niño pequeño, y planificar en consecuencia. Los niños muy pequeños se desarrollan rápidamente, por lo que el personal deberá revisar las observaciones con más frecuencia.

El personal directivo de EHS y MSHS puede apoyar al personal con la presentación y revisión de las observaciones, asegurándose de que se dedique tiempo a estas tareas.

Incluya a las familias en el proceso de observación

Considere la siguiente historia de un visitador del hogar.

Durante una visita al hogar, vi cómo Troy y Celeah trataban de que su hija, Jasmine (de 18 meses), jugara un juego de hacer corresponder objetos similares (dos bolas amarillas y un cilindro amarillo de madera). La primera vez que Troy sostuvo una bola redonda amarilla y le pidió a Jasmine que encontrara una como esa, la niña recogió la otra bola amarilla. Tanto Troy como Celeah aplaudieron y le dijeron a Jasmine: "¡Buen trabajo, encontraste la pelota!". Troy luego puso la pelota en el piso y le pidió a Jasmine que hiciera lo mismo. Jasmine hizo rodar la pelota por el piso en dirección adonde estaba Celeah. Celeah tomó la pelota y le pidió a Jasmine que encontrara una como esa.

En lugar de recoger la otra pelota, Jasmine agarró el cilindro y lo hizo rodar hacia su madre. Celeah dijo enseguida: "No, no. Busca la pelota que se parece a la mía. Mira, es redonda y amarilla". Jasmine se sentó un momento y luego gateó hacia su madre, alcanzó el cilindro y lo hizo rodar hacia su padre. Troy miró a Jasmine. Sacudió la cabeza, suspiró y dijo: "Está bien. Quieres hacer rodar cosas. Bueno. Voy a tirarte la pelota para que vaya rodando". Durante los minutos siguientes, Troy, Celeah y Jasmine se tiraron las pelotas y el cilindro para que rodaran. Me encantó esto. Era la primera vez que veía a Troy y Celeah seguir la iniciativa de Jasmine en lugar de protestar porque ella no seguía sus instrucciones.

Después de que terminaron de jugar, compartí mi observación con ellos y les pregunté qué habían notado sobre su interacción con Jasmine. Troy sonrió y dijo: "Bueno, fue mucho más fácil que hacerla jugar el juego y verla empezar llorar y que yo me sintiera frustrado. No sabía que podía prestar atención así. ¡Incluso me divertí!". En la próxima visita al hogar, Troy, Celeah y Jasmine me mostraron otros objetos domésticos que ruedan.

Hable con las familias acerca de por qué y cómo se hacen las observaciones en el programa. Enséñeles estrategias de observación tales como "mirar, preguntar, adaptarse". Proporcione información pertinente, tanto verbalmente como por escrito en los idiomas del hogar de las familias, sobre el desarrollo del niño para que las familias tengan una comprensión más clara de lo que observan. Invítelos a compartir lo que observan acerca de sus hijos verbalmente, a través de imágenes y fotografías, o por escrito (p. ej., notas en cuadernos que se envían del hogar al programa y viceversa, correos electrónicos o intercambios de texto según lo permitan las políticas de comunicación del programa).

1 Koralek, Dombro y Dodge, El cuidado de bebés y niños pequeños, pág. 374 (en inglés).

2Jablon, Dombro y Dichtelmiller, El poder de la observación, págs 88 a 90 (en inglés).

3Koralek, Dombro y Dodge, El cuidado de bebés y niños pequeños, pág. 376, pág. 378.