Los cimientos: interacciones y entornos

Marco para las prácticas eficaces donde resaltan las interacciones y los entornos de los cimientos.Las interacciones sustentadoras, receptivas y efectivas y los entornos atrayentes son los cimientos de todo aprendizaje en los entornos de la primera infancia. Los niños y las familias se benefician cuando esas interacciones y entornos son receptivos desde un punto de vista cultural y lingüístico.

Los entornos grupales del aprendizaje temprano de alta calidad incluyen:

  • Un ambiente de aprendizaje bien organizado y administrado.
  • Apoyo social y emocional.
  • Prácticas docentes e interacciones intencionales y materiales que estimulan el pensamiento, el desarrollo y las habilidades de los niños.
  • Interacciones y entornos contra el sesgo.

En los programas basados en el hogar, las interacciones entre el visitador del hogar y los padres que son atentos, sensibles e intencionales apoyan el papel de los padres como los primeros y más importantes maestros de su hijo. Los visitadores también ayudan a los padres a utilizar su hogar y la comunidad como ambientes de aprendizaje.

Indicadores de equidad

Desde que nacen, los niños desarrollan identidades culturales a través de relaciones cercanas que actúan como base para todos los demás aprendizajes. Contar con entornos y personal que responden a la identidad del niño crea un clima de respeto por la cultura y el idioma de cada niño. Las interacciones, sean intencionales o no, que comunican creencias negativas sobre la cultura, la etnia, el idioma, el género o la estructura familiar de un niño y su familia pueden tener un impacto negativo en las relaciones entre adultos y niños, en la identidad del niño y en la autoeficacia.

IndicadoresEjemplosHSPPSMCP

Los entornos, incluido todo el lenguaje escrito y verbal, están libres de sesgos y microagresiones raciales, lingüísticas y de género.

Los materiales en el entorno son accesibles para los niños con discapacidades.

Las políticas y prácticas respetan las preferencias familiares culturales e individuales de crianza (p. ej., prácticas de alimentación, aseo).

Las interacciones entre adultos y niños, las experiencias y actividades de aprendizaje planificadas y espontáneas, y los materiales comunican a los niños de raza negra, a los latinos, indígenas, a otros niños que no son considerados de raza blanca y a los niños con discapacidades que sus identidades irradian talento y alegría.

Los programas incorporan el conocimiento y la pericia de las familias a las experiencias de aprendizaje de los niños.

Las interacciones entre adultos y niños, las experiencias de aprendizaje y el entorno afirman el idioma del hogar, el estilo lingüístico y la expresión cultural de los niños.

El personal busca comprender el impacto de su propia cultura en sus creencias e interacciones con los niños y las familias.

El personal aprende la historia y las fortalezas culturales y lingüísticas (en inglés) de cada comunidad representada en su programa, incluidas las que han sido históricamente marginadas.

Existe una política por escrito para revisar de manera regular los materiales (p. ej., libros, juguetes) para detectar los sesgos culturales y la accesibilidad.

El personal les pide información directamente a los padres y a otros miembros de la familia sobre sus metas, valores y preferencias culturales para el cuidado de su hijo.

El personal docente adopta una mentalidad de "nuevo comienzo" en relación con los niños y con ellos mismos. A cada niño se le da la oportunidad de comenzar cada día sin que se mencionen comportamientos anteriores. El personal docente demuestra un nuevo comienzo con saludos cálidos, creando conexiones personales intencionales con cada niño y familia a través de notas positivas en el hogar y usando frases alentadoras.

La enseñanza y el ambiente de aprendizaje, 45 CFR § 1302.31

Educación en los programas basados en el hogar, 45 CFR §1302.35(a–e)

Preservación y revitalización de las lenguas tribales, 45 CFR §1302.36

Todos estamos formados por la cultura. Cada uno de nosotros está arraigado en una cultura que es única, que evoluciona y está influenciada por muchos factores, incluida nuestra familia, comunidad e historia.

Los programas equitativos acogen la reflexión y el cambio. Los programas que incorporan las diferentes culturas desafían los prejuicios sistémicos, comunitarios, programáticos y personales y enseñan habilidades para fomentar la pertenencia.

Es esencial tener conocimientos específicos sobre la cultura del niño y la familia. Un primer paso para mantener programas que incorporan las diferentes culturas es que los educadores aprendan sobre las culturas de cada familia matriculada en el programa y cuestionen los estereotipos.

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