Guía de orientación para los administradores de salud

Planificación individualizada para los CSHCN

Niño corriendo por un sendero de tierra.Después de identificar a un niño con necesidades especiales que requieren atención médica, el siguiente paso en el proceso de planificación individualizada de la atención de la salud es centrarse en las necesidades únicas de atención médica de ese niño. Dicho proceso también puede brindarle al niño la oportunidad de alcanzar su potencial en un ambiente seguro y de restricción mínima. La planificación individualizada de la atención de la salud es un proceso de comunicación muy importante entre el personal del programa Head Start, la familia y los proveedores de atención médica.

La planificación individualizada permite una mejor:

  • comunicación y colaboración,
  • promoción de la salud,
  • prevención de posibles complicaciones,
  • detección de necesidades de capacitación y asistencia para apoyar la autoeficacia o confianza tanto del personal como de la familia en el cuidado que les brindan a los CSHCN

Por lo general, la documentación de la planificación individualizada de la atención de la salud se realiza mediante un IHP que se formula en colaboración con el proveedor de atención de la salud, el programa Head Start y la familia. El IHP es un recurso esencial para el personal del programa Head Start que tiene a su cargo a un niño con necesidades especiales que requieren atención médica. Algunos programas usan otro nombre para el IHP, pero los componentes del plan son los mismos.

El Plan individual de atención de la salud (IHP, sigla en inglés) es un recurso para todo el personal, incluidos los sustitutos, que tienen a su cargo a un CSHCN para que comprendan mejor las necesidades especiales específicas que requieren atención médica, así como las modificaciones, los tratamientos, los medicamentos necesarios y los problemas de seguridad.

Un niño debe tener un IHP si necesita:

  • que el personal esté al tanto de su problema de salud;
  • adaptaciones para las actividades diarias debido a una afección de salud;
  • modificaciones, tratamientos o medicamentos mientras está en el programa;
  • un plan para hacer frente a las emergencias médicas.

Las siguientes personas deben contribuir a la formulación y revisión del IHP:

  • la familia del niño;
  • el personal que cuida al niño, incluidos los sustitutos;
  • el personal y los consultores de salud;
  • los proveedores de atención médica;
  • otros proveedores de servicios o personal de Head Start, según sea necesario.

Estas son las partes clave de un IHP:

  • la información de contacto del niño y la familia;
  • el diagnóstico o diagnósticos del niño;
  • la información de contacto de los proveedores de atención primaria de salud, especialistas y proveedores de servicios;
  • los detalles sobre las modificaciones a lo largo de la rutina diaria, los medicamentos (habituales y de emergencia) y los procedimientos médicos que el niño podría necesitar durante el tiempo que esté en el programa;
  • las alergias;
  • las modificaciones en la dieta;
  • los planes de emergencia;
  • las instrucciones especiales;
  • los recursos para obtener más información sobre afecciones o procedimientos médicos;
  • las firmas de la persona que prepara el IHP, de los docentes y del personal que revisó y recibió capacitación sobre el IHP y de la familia.

Consejos y estrategias para apoyar la planificación individualizada para los CSHCN

  • Tenga en cuenta los conocimientos básicos sobre salud de los principales usuarios del IHP (p. ej., el personal).
    • Evite usar términos técnicos o médicos confusos o si los usa, defínalos claramente.
    • Presente información e instrucciones sencillas y fáciles de seguir.
    • Ofrezca recursos e imágenes adicionales que respalden el IHP.
  • Tenga disponibles plantillas o muestras del IHP (en inglés), sobre todo para las necesidades comunes de atención de la salud, como asma, alergias graves y crisis epilépticas.
  • Use el IHP para determinar qué conocimientos y habilidades necesitan los maestros y cuidadores para ayudar a que el niño participe de manera segura en las actividades diarias. La comunicación regular y continua con los educadores es fundamental tanto para el personal como para el niño.
  • Asegúrese de que todo el personal comprenda las políticas y prácticas para la administración de medicamentos. Todo miembro del personal que no haya sido capacitado para administrar medicamentos debe saber a quién contactar si un niño necesita medicamentos.
  • Determine qué expertos pueden apoyar la planificación individualizada de la atención de la salud de su programa mediante la evaluación, la formulación del IHP y la capacitación del personal. Entre estos expertos pueden estar:
    • el supervisor de salud;
    • el personal de salud;
    • los consultores de salud para el cuidado infantil;
    • los miembros del Comité Asesor de los Servicios de Salud (HSAC, sigla en inglés);
    • otros miembros del personal del programa Head Start;
    • los proveedores de atención médica;
    • los proveedores de servicios;
    • las organizaciones o programas que brindan apoyo para afecciones específicas, como un grupo de apoyo de un hospital infantil.
  • Recurra a la experiencia y los conocimientos de los miembros de la familia del niño, quienes probablemente estén familiarizados con los procedimientos médicos habituales y de urgencia, las modificaciones y los medicamentos. Ellos pueden darle información, como por ejemplo:
    • Consejos sobre cómo administrarle los medicamentos a su hijo, por ejemplo, cantando una canción o siguiendo un ritual.
    • Señales específicas que indiquen que tienen que administrar un medicamento que el niño usa si lo necesita.
    • Síntomas de una emergencia que el personal tiene que atender de inmediato.
  • Incluya en el IHP la planificación para situaciones especiales como excursiones, tiempo al aire libre, simulacros de emergencia y evacuaciones, y transporte.
  • Revise regularmente el plan con el personal para asegurarse de que todos sepan dónde encontrarlo y los detalles sobre los medicamentos. Responda preguntas y comente cualquier desafío que surja en la implementación del plan. Considere cómo los sustitutos y los maestros nuevos reciben capacitación sobre el plan y manténgase al día con los cambios.
  • Comuníquese regularmente con el personal y los miembros de la familia para recibir la información más reciente.
  • Actualice el plan al menos una vez al año y cuando haya algún cambio, como la información de contacto del proveedor de atención médica, los antecedentes de salud del niño, los medicamentos que toma o el tratamiento que sigue.