Guía de orientación para los administradores de salud

Cultura de seguridad y supervisión activa

Un adulto supervisa a un niño en un tobogán del patio de juego.Para promover el desarrollo óptimo de los niños, cada programa crea y aplica políticas y procedimientos que proporcionan entornos seguros para que los niños estén activos y listos para aprender. Los gerentes, el personal y las familias toman medidas para mantener a los niños seguros al incorporar la seguridad en la cultura del programa. Todos trabajan en conjunto para lograr una cultura de seguridad, y cada persona entiende su papel y responsabilidades en la prevención de lesiones.

Todos contribuyen a un entorno que permite que las personas den su opinión sobre las preocupaciones relacionadas con la seguridad. Los programas utilizan los errores como oportunidades de enseñanza e incorporan esta información a la capacitación y la planificación futura. Los programas pueden mantener la seguridad de los niños mediante la coordinación e integración de acciones básicas en las actividades del programa.

10 acciones para crear una cultura de seguridad

Estas 10 acciones son estrategias de prevención de lesiones basadas en información científica y utilizadas por los programas de la primera infancia. Los programas pueden utilizar sus sistemas de gestión para integrar estas 10 acciones en todas sus actividades.

  1. Usar datos para tomar decisiones
    Para tomar decisiones informadas, los programas pueden recopilar, analizar, usar y compartir datos para planificar, implementar y evaluar estrategias de prevención de lesiones. Los datos sobre lesiones e incidentes son una fuente importante de información para evaluar la seguridad de los niños e identificar las estrategias más efectivas y minimizar el riesgo de lesiones. Las Instrucciones para la identificación de peligros en programas es una herramienta para identificar patrones de lesiones y así entender los pasos a seguir para evitar que vuelvan a ocurrir.
  2. Supervisar activamente
    Los niños pequeños tienen más probabilidades de lesionarse cuando no están bajo supervisión. Los niveles más bajos de supervisión por parte de los adultos se asocian con una mayor probabilidad de lesiones más graves en niños pequeños. Tener un adulto atento cerca es la mejor manera de prevenir lesiones. El personal necesita un proceso sistemático y fácil de usar para configurar el entorno, observar e interactuar con los niños para promover la seguridad infantil. La supervisión activa ofrece una estrategia efectiva en seis pasos para que los adultos miren, escuchen y participen para prevenir lesiones infantiles. Los seis pasos para implementar la supervisión activa son:
    • Configurar el entorno. Configure el entorno para que el personal pueda observar a los niños en todo momento. Cuando las actividades se agrupan y los muebles están a la altura de la cintura o más abajo, es más fácil ver y escuchar a los niños. Asegúrese de que los espacios no estén desordenados y permitan un fácil acceso a los niños.
    • Ubicar al personal. Planifique dónde se ubicará el personal para ver y escuchar a todos los niños. Asegúrese de que siempre haya paso despejado para llegar a los niños y así el personal pueda reaccionar rápidamente y brindar apoyo adicional cuando sea necesario.
    • Observar y contar. Observe continuamente todo el entorno para saber dónde están todos y qué están haciendo. Cuente a los niños con frecuencia. Esto es especialmente importante durante las transiciones cuando los niños se mueven de un lugar a otro.
    • Escuchar. Algunos ruidos o la ausencia de ellos puede significar un motivo de preocupación. Escuche atentamente para identificar señales de peligro potencial.
    • Anticipar el juego de los niños. El personal tiene en cuenta lo que sabe sobre los intereses y habilidades individuales de cada niño para predecir lo que harán. Saber qué esperar puede ayudar a proteger a los niños de cualquier daño.
    • Involucrarse y redirigir. Sepa cuándo ofrecer apoyo a los niños. Espere hasta que los niños no puedan resolver los problemas por sí mismos para involucrarse. Ofrezca diferentes niveles de asistencia o redirección dependiendo de las necesidades individuales de cada niño.
  3. Mantener los entornos seguros y protegidos
    Elimine los objetos que representan un riesgo de lesiones de los espacios en donde se encuentran los niños. Mantener un entorno seguro implica eliminar los objetos que representan un riesgo o almacenarlos en gabinetes cerrados con llave.
  4. Hacer que los parques infantiles sean seguros
    Los niños trepan, corren y juegan de manera segura en entornos al aire libre que cumplen con los requisitos federales, tribales, estatales y locales y las mejores prácticas para equipos de juegos infantiles apropiados para su edad y desarrollo. El personal inspecciona los parques infantiles e informa o elimina los peligros antes de cada uso para mantener la seguridad.
  5. Transportar a los niños de forma segura
    Los programas crean, implementan y hacen cumplir de manera regular las políticas y procedimientos de cualificación de conductores, las inspecciones de vehículos y la seguridad de los niños como pasajeros. La capacitación para el personal de transporte y los contratistas debe incluir medidas para tener en cuenta a los niños en todo momento, especialmente cuando entran y salen del vehículo.
  6. Denunciar el maltrato y descuido de menores
    Cuando alguien sospecha que un niño puede ser maltratado o descuidado, está legalmente obligado a seguir las políticas y procedimientos para reportar sospechas de maltrato y descuido de menores.
  7. Prepararse para los cambios que afectan la seguridad
    Los programas identifican transiciones y cambios en el entorno, que incluyen cambios en el cuidador, la actividad o la ubicación. El personal reconoce el impacto de las transiciones y los cambios en la rutina diaria y brinda apoyo adicional a los niños que tienen más probabilidades de tener problemas con estos cambios. También practican la supervisión activa para proteger a los niños de lesiones.
  8. Dar ejemplo sobre comportamientos seguros
    El personal da demostraciones de comportamientos seguros y luego anima a otros adultos y niños a que se comporten de la misma manera. Dar ejemplo de comportamientos seguros es una parte importante de las relaciones enriquecedoras y positivas que el personal establece con los niños y las familias.
  9. Colaborar con las familias en asuntos de seguridad
    Las conversaciones sobre seguridad en el hogar comienzan en el momento de la matrícula, durante el proceso de asociación familiar y continúan durante todo el año. Apoye a las familias haciendo énfasis en los riesgos de seguridad para los bebés, niños pequeños y niños en edad preescolar. Realice las pruebas de seguridad en el hogar e identifique las prácticas para dormir y otras prácticas seguras. El personal puede ayudar a las familias a reducir el número y la gravedad de las lesiones que ocurren en el hogar ayudándoles a obtener suministros de seguridad como detectores de humo y puertas para bebés.
  10. Conocer a los niños y a las familias
    El personal entiende el nivel de desarrollo y las habilidades de cada niño y las preferencias, la cultura y las tradiciones de cada familia. Participar en asociaciones respetuosas y orientadas a objetivos con las familias les ayuda a sentirse bienvenidos y seguros mientras construyen relaciones de confianza a lo largo del tiempo.

La seguridad de los niños es una prioridad principal para todos los programas Head Start y Early Head Start. La supervisión activa es la estrategia más eficaz para crear un entorno seguro y prevenir lesiones en los niños pequeños. Esta transforma la supervisión desde un enfoque pasivo a una habilidad activa.

Consulte las Preguntas orientadoras para la supervisión activa y la seguridad para obtener más información sobre la incorporación de la seguridad en todos los niveles de los sistemas de gestión de Head Start.